AJOS
Genero: Masculino.
Elemento: Fuego.
Deidad: Hécate.
Usos mágicos:
Protección, curación, exorcismo, deseo sexual y
antirrobos.
El ajo se comía en las fiestas dedicadas a Hécate y
se dejaban en una encrucijada como sacrificio en nombre de esta Diosa.
Se
utiliza para protegerse de la peste.
Todavía se emplea para absorber enfermedades.
Sólo se tiene que frotar con los dientes de Ajo,
frescos y pelados en la parte afectada del cuerpo, y luego tirarlos al agua
corriente.
Es un gran protector, se pone en casa para evitar
la intrusión del mal, para mantener alejados a los ladrones, y se cuelga en la
puerta para repeler a las personas envidiosas.
El Ajo protege las casas nuevas.
Si se lleva consigo protege de los enemigos y del mal tiempo.
Se muerde un Ajo
para ahuyentar los malos intrusos, o esparciendo su polvo por el suelo.
También se pone bajo las almohadas de los niños
para protegerlos mientras duermen.
Si se frota sobre las cacerolas y sartenes antes de
cocinar elimina las vibraciones negativas que podrían contaminar los alimentos.
Si se come actúa como inductor del deseo sexual.
Y cuando un magneto o piedra de imán natural se
frota con Ajo, pierde sus poderes mágicos.