El Mago Merlín
Merlín fue un mago galés que se cree que vivió a finales del siglo VI d.C., y
una de las figuras centrales del ciclo artúrico. Es sin duda el mago más famoso
de la historia, e inspirador de otros tantos magos de la literatura universal.
Merlín está presente en las leyendas celtas desde hace muchísimos siglos.
Durante los siglos XII y XIII, se le representó con
los mismos rasgos que hoy le identifican.
La transformación del personaje de Merlín, profeta bretón que aparecía
tradicionalmente en las leyendas celtas, se la debemos a Geoffroy de Monmouth,
sabio y obispo galo autor de una Vie de Merlín en 1148, y a Robert de Boron,
poeta anglonormando, autor de un Merlín a finales del siglo XII. Ambos hicieron
de él el hijo de un demonio y una virgen, le otorgaron poderes sobrenaturales y
lo integraron en la leyenda del rey Arturo, fundador de la Tabla Redonda en el
siglo Vi. Según estos autores, Merlín fue el iniciador del rey Arturo.
El nacimiento de Merlín se sitúa en las Islas Británicas, en Gales, hacia el
año 470, algún tiempo antes de que naciera el rey Arturo.
Se cree que su padre era un magistrado romano y su
madre una vestal (sacerdotisa virgen consagrada a Vesta, la diosa romana del
fuego del hogar) que renegó de sus votos.
En los tiempos pasados del Imperio romano, una
conducta de este tipo se condenaba con la pena de muerte.
Para salvar su vida, la madre de Merlín expuso ante
los jueces que su concepción había sido sobrenatural, afirmando que el hijo que
llevaba en su seno era el elegido de los dioses. Además, al nacer el niño le
llamó Ambrosio, que significa "inmortal" (la ambrosia era el néctar
de los dioses mitológicos).
Más tarde, Ambrosio se convertirá en Merlín, bardo
o poeta, músico y cantante, pero al mismo tiempo druida adivino, mago y
consejero de Ambrosio Aurelio, el príncipe liberador de la isla de Bretaña que
se opondrá al rey y perseguirá a los sajones, aliados de este último, hacia
finales de siglo