Cuando alguno sobre su casa oía charrear a la
lechuza, tomaba mal agüero, luego sospechaba que alguno de su casa había de
morir o enfermar, en especial si dos o tres veces venía a charrear allí, sobre
su casa, tenía por averiguado que había de ser verdadera su sospecha; y si por
ventura en aquella casa donde venía a charrear la lechuza estaba algún enfermo,
luego le pronosticaban la muerte.
Todos le temían a la lechuza pues decían que era
mensajera del dios Mictlantecutli, que iba y venía al infierno, por eso le
llamaban Yautequiua, que quiere decir mensajero del dios del infierno que
andaba a llamar a los que le mandaban.
Las lechuzas habitan en los campos, es una criatura
que inspira admiración.
Es un animal carnívoro, lo cual significa que puede
ser un guerrero feroz pero puede ser fácilmente domesticado. La lechuza vive de
noche o mejor dicho está despierta la mayor parte de la noche y es muy buena
cazadora de todo insecto que pulule en la oscuridad.
Tiene una gran consciencia en todo momento de todo
lo que hay a su alrededor.
Posee una visión increíble, lo cual significa que
ve claramente todo.
Tiene una gran intuición: es el tótem de los
psíquicos y clarividentes.
Posee la valentía de seguir sus instintos.
Se le llaman rapaces nocturnas por ser más activas
durante la noche y ser carnívoras.
Pero su parentesco con las rapaces diurnas es tan
cercano como al de cualquier otro grupo de aves. Las lechuzas y los búhos son
aves depredadoras, muy bien adaptadas a una vida nocturna.
Aunque hay algunos miembros de este grupo que por
lo general cazan durante las horas del día.
La visión y el oído lo tienen muy
desarrollado.
La cabeza, en proporción al cuerpo, la tienen más grande que las otras
aves.
Las plumas de las alas amortiguan el aire de tal
forma que cuando vuelan, no hacen ningún ruido.
Existen lechuzas y búhos de todos los tamaños,
desde uno miniatura que habita en los campos, hasta el gran búho cornado, es
una criatura que inspira admiración.
Si la lechuza llega con sigilo a tu vida, te esta
pidiendo que utilices tus poderes de observación aguda y silenciosa para intuir
una situación vital.
Haz caso de las señales y los presagios, estate
atento a los sueños, la verdad siempre aporta mayor iluminación.